La coinoculación lleva a un mayor crecimiento de las raíces, con una mayor sanidad de la planta “bajo tierra”. Importantes beneficios justifican su utilización.

Los productos biológicos son micro-organismos vivos que utilizamos en la agricultura; entre ellos, principalmente los hongos y las bacterias.

Trabajamos con Planix, un producto a base de Azospirillum brasiliensis. Se trata de una bacteria que tiene la capacidad de fijar nitrógeno para cultivos de gramíneas como maíz y trigo; pero se observó que, cuando se utilizaba esta bacteria en otros cultivos, potenciaba el desarrollo de la planta, tanto de las hojas y de los tallos como de las raíces.

Otra bacteria que ya se utiliza desde hace varios años en la agricultura es el Bradhiryzobium, cuyo beneficio es proveer nitrógeno para la soja. Esto, a través de una asociación simbiótica (donde los 2 individuos asociados tienen beneficios). La planta sirve de hospedera a la bacteria y ésta provee de nitrógeno a la planta.

A la asociación de estas 2 bacterias en el cultivo de la soja la llamamos coinoculación. Se observó que cuando utilizamos estos 2 micro-organismos, tenemos un mayor desarrollo de las raíces de las plantas y una mayor formación de nódulos fijadores de nitrógeno. Todo eso lleva a una mayor productividad en el final del ciclo de la soja.

Resultados visibles

¿Sus ventajas? El costo de los productos biológicos es relativamente bajo… y sobre la cantidad de nitrógeno que Bradhiryzobium provee al cultivo de la soja, si tuviéramos que proveerlo de manera química (con fertilización de base), tendríamos un costo mucho mayor que utilizando estos productos biológicos. Otra ventaja de la coinoculación es la eficiencia: además de recibir ese nutriente, la planta va a tener un mejor desarrollo de raíces; y con eso, va a tener una mayor capacidad de soportar estrés por falta de agua, y va a tener también una mayor eficiencia para absorber otros nutrientes.

Las desventajas de los productos biológicos están relacionadas a su viabilidad: como son organismos vivos, debemos tener cuidado en el momento de almacenarlos. El embalaje ya viene preparado para mantener los organismos viables por más tiempo, y tienen que ser aplicados directamente en la semilla o en el surco, lo más cerca posible de la siembra.

El Bradhiryzobium es una bacteria especifica para la soja, mientras el Azospirillum puede ser utilizado en diferentes cultivos.

Los productos biológicos son un mercado en crecimiento. Hay muchas cosas que están siendo desarrolladas. Son de un costo relativamente bajo y de una óptima eficiencia, y sólo tienen beneficios para ofrecer. También tienen compatibilidad con los principales productos utilizados para el tratamiento de semillas.

Redacción: Michel Scherer    Desarrollista de Agrofértil para los productos de la línea Fertilize.